Presentación

Esta es una traducción, hecha por mí (junto con las notas y esquemas), del ensayo Jerusalem 607 BCE, en su revisión de 2007, publicado por jehovahsjudgment.co.uk



24 may 2012

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1- Introducción.

   El apóstol Pablo declaró una vez: “De entre ustedes mismos se levantarán varones y hablarán cosas aviesas para arrastrar a los discípulos tras de sí”. Hoy esta misma cosa está pasando. Testigos de Jehová apóstatas junto con opositores atacan nuestras creencias desde todos los ángulos, esto incluye nuestra doctrina acerca de 1914.

   Nosotros creemos que Jesucristo comenzó a gobernar invisiblemente en los cielos en 1914, y derivamos esta creencia en una interpretación de la profecía de los siete tiempos de Daniel. Los siete tiempos duran 2520 años y comenzaron cuando Jerusalén fue destruida por el imperio babilonio y el último rey davídico fue removido. Nuestra estricta cronología bíblica ubica este evento en el año 607 aec. Contando 2520 años a partir de esa fecha llegamos al año 1914 ec. Para una explicación más detallada de esta interpretación y cómo tiene un sólido fundamento bíblico véase el apéndice A.

Esto, sin embargo, está en conflicto con la ampliamente aceptada cronología de los historiadores. Ellos creen que Jerusalén fue destruida en 587 aec., veinte años después de lo que nosotros decimos. Si ellos están en lo correcto la doctrina de 1914 tiene un serio problema: ¡Estaría desfasada por veinte años! Sin embargo, este ensayo se propone mostrar -con la Biblia- que la cronología de los testigos de Jehová basada en el 607 aec. es correcta.

El verdadero asunto: Setenta años.

   ¿Por qué nosotros estamos en desacuerdo con los historiadores seglares? La cronología seglar está basada en la interpretación de antigüas tablillas de arcilla, de escritos, y de inscripciones; de estos ellos disciernen  cuánto se extendió el gobierno de cada rey babilonio antes de que el imperio fuera conquistado en 539 aec. Para un breve comentario acerca de la evidencia seglar véase el apéndice B.

   Contando hacia atrás desde esa fecha y añadiendo lo que ellos disciernen que duraron los reinados de cada rey, se encuentra que 605 aec. fue el primer año del poderoso rey Nabucodonosor. Jeremías dijo que este rey destruyó la ciudad de Jerusalén en su 19° año de reinado. De esta manera, contando hacia adelante 19 años llegamos al 587 aec. Dicho sea de paso, este es también el método de conteo cronológico que usa la cristiandad. (1)

   Por otra parte, los testigos de Jehová creen en algo en que los historiadores seglares no creen. Nosotros creemos que la Biblia es la inspirada e infalible palabra de Dios, y por eso tomamos en cuenta las profecías de la Biblia cuando hacemos cálculos sobre cronología antigüa.

   El profeta Daniel nos dice: “Jerusalén yacerá en ruinas por setenta años”(Daniel 9.2 Contemporary English Translation). Sin embargo la cronología seglar discrepa con la Biblia. Su cronología permite sólo cincuenta años -no setenta- desde 587 aec., cuando Jerusalén supuestamente fue destruida, hasta el regreso de los judíos a su tierra en 537 aec. (2)

   Así pues, los testigos de Jehová no aceptan la cronología seglar cuando ésta contradice a la Biblia. Por lo tanto, contando hacia atrás desde 537 aec. (el año en que la Biblia dice que los judíos regresaron a su hogar) setenta años completos llegamos al año 607 aec. Este debe ser el año en que Jerusalén fue destruida (3). La fecha seglar de 587 aec., veinte años desfasada, debe ser errónea. Las siguientes páginas de esta obra mostrarán con otras profecías de la Biblia por qué el año 607 aec. debe ser el correcto.

Setenta años ¿de qué?

   El método para llegar al 607 aec. parece bastante simple. ¿Cómo podría alguien ignorar las claras palabras de la Biblia y poner la cronología seglar por encima de la palabra inspirada de Dios? Cualquier apóstata que se precie no querría ser visto como si estuviera contradiciendo a la Biblia, porque eso alejaría a otros de sus intentos por desacreditar la doctrina de 1914 y alejarlos de la verdad.

   Así que, en vez de eso, ellos tuercen la profecía de los setenta años de “devastación” (o ruinas) para hacer que “en realidad” signifique otra cosa. Si lograran mostrar que el 607 es incorrecto y que aún así la profecía de los setenta años se cumplió completamente entonces no habría ninguna razón por la que los testigos de Jehová no debieran aceptar la cronología seglar, aceptando, como consecuencia, que la doctrina de 1914 debe ser desechada.

   Característicamente los apóstatas usan dos diferentes enfoques: Claman que los setenta años “en realidad” significan mera servidumbre al rey de Babilonia, o también que “en realidad” significan algún tipo de vaga o figurativa devastación por setenta años. Llegan al extremo de considerar irrelevante el saber cuánto tiempo yació Jerusalén en ruinas. Esto a pesar de que las Escrituras claramente establecen que Jerusalén estaría en ruinas y sin ningún habitante.

   Por lo tanto ¿dicen las Escrituras que Jerusalén yacería en ruinas setenta años completos, o no?

-607 aec. es la fecha en que Jerusalén fue destruida por Babilonia.
-1914 ec. es calculado usando aquella fecha como punto de partida. Si 607 aec. es incorrecto 1914 ec. también es incorrecto.
-La Biblia dice que Jerusalén yació en ruinas por setenta años.
-Los historiadores seglares, los apóstatas, y la cristiandad dicen que solamente fueron cincuenta años.
-Ellos claman que fueron setenta años de servidumbre y no de desolación.
-Claman que la fecha de la destrucción de Jerusalén no tiene importancia.
 Notas:

1-

2-

3-


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